El monje asistió a una reunión de brujos asintiendo en todas las azañas que estos contaban a el, la mayoría tenían sus cuerpos desfigurados, pero se encontraban en la mejor disposicion de ayudarlo, pues este ya había tenido "contacto" con ellos en otros planos, y aseveran los brujos que las personas de corazón puro merecen trascender esta vida en las mejores condiciónes.
El monje regreso a su templo, para re-dimensiónar las cosas que lo rodeaban,entre ellas una niña con apariencia esquizofrenica en un principio, pues demasiada bondad y confusión la acompañan.
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