Renaisment

miércoles, 21 de agosto de 2013

Return of SELF

Después de un gran letargo, me percato de las dimensiones del desastre por el cual he pasado bienaventurado.
Logre zafarme de los juicios banales de una mortal, para ser libre de nuevo. Nunca me había entregado tanto a la misión de corresponder a un gran amor, jamás había llorado tanto, nunca me había esmerado por nadie que no fuera yo mismo.
Nunca había sido fiel a nada que no fueran mis ideales y mis principios, jamás había pensando por otra persona y por sobre todo, jamás pensé que eso no retribuyera nada.
Hoy, después de tanta transmutación y dimensiones trascendidas, volteo hacia abajo y te veo allí, viéndome de lejos, observando como reconstruyo mis cimientos y como extiendo mis alas. Aquellas que me arrancaste para sobresalir en la decadencia en la que te encontrabas, creyendo en hombres reptiles, en extraterrestres y en otras absurdas ilusiones.
Desde otras vidas, he venido siendo un guerrero y eso desgraciadamente nos hacia incompatibles. Nuestras esencias jamás se fundieron, una princesa de castillo jamás podrá recorrer el sendero con el caminante, ni con errantes magos amargados y de mal genio, tampoco con arlequines dispuestos a llorar para que otros rian, o que decir del cristo que se sacrifica por los demás, o del buda que se ilumina para los demás. Hoy como el ermitaño, con un pequeño fuego que empieza a iluminar toda la oscuridad, prosigo mi camino, el de la eternidad. La sangre que te di a probar te hizo mal, necesitabas algo más light...